Si de algo puede presumir España, es de contar con una gran cantidad de atractivos turísticos, una amplia variedad de regiones con encanto en sus diferentes vertientes, desde ciudades y pueblos en la costa, con playas sorprendentes, pasando por grandes ciudades como Madrid, Barcelona o San Sebastián, e incluso, hasta pueblos entre las montañas y en parajes naturales paradisíacos. Este último caso es el de Asturias, una región localizada al norte de España, caracterizada por el verdor de sus paisajes.
Te cuento algunas de las ciudades y pueblos de Asturias que no te puedes perder si quieres visitar esta zona de España y, quién sabe, incluso para hacer una ruta en coche u otro medio de transporte durante varios días y conseguir una panorámica completa del lugar.
Lugares que visitar en Asturias
Figueras, Castropol
Figueras es una villa del concejo de Castropol situada a orillas del río Ribadeo, que sirve como frontera natural con Galicia, por lo que es ideal si también quieres visitar esta parte del norte de España. Ya en el siglo XI fue nombrada como villa, por lo que se trata de una región con mucha historia, debido a su antigüedad. En esta ciudad encontrarás varias playas que forman parte de la Reserva Natural Parcial de la Ría de Eo, como las playas de Arnao, de San Román, del Tesón, de la Arnela o A Playa dos Botes.
Entre los siglos XVI y XVII, la villa fue creciendo, y muestra de ello es la construcción de la Iglesia de Santiago apóstol, el Fuerte de Arroxo, la Ermita de la Atalaya y el Palacio de los Pardo Donlebún, familia de un gran militar que participó en las incursiones de la Armada Invencible.
Para vivir la historia de manera inmersiva, no te puedes perder la oportunidad de alojarte en un palacio en Asturias, como el que encontrarás en Figueras.
Oviedo
Oviedo es la capital de Asturias. Tiene su origen en el siglo VIII, como asentamiento de los monjes del monasterio de San Vicente. Aun así, se han descubierto restos arqueológicos de época romana recientemente. En el siglo IX, Oviedo pasa a ser la capital del reino de Asturias y la ciudad toma más importancia, como demuestran construcciones tales como la muralla, de la que hoy se conservan pocos fragmentos.
Oviedo es uno de los centros donde puedes disfrutar de más manifestaciones del arte prerrománico, como la Iglesia de San Tirso, el Palacio de Santa María del Naranco, que fue transformado en Iglesia, el edículo de la Foncalada y la gran Catedral de San Salvador, de estilo gótico, y distintas capillas y una girola de estilo barroco.
Uno de los aspectos estrella de toda Asturias es la gastronomía. El plato típico por excelencia es la fabada, un guiso caliente de faba asturiana (un tipo de judía blanca), embutidos como chorizo y morcilla asturiana, y carne de cerdo. Otro plato típico de Oviedo es el desarme, un menú elaborado a partir de garbanzos con bacalao y espinacas, callos y arroz con leche típico de la festividad del día 19 de octubre. Además, estas comidas se suelen acompañar con sidra, otro de los elementos culinarios típicos de Asturias.
Gijón
Por último, otra de las grandes ciudades es Gijón. Esta villa se encuentra a una distancia de 28 kilómetros desde Oviedo. De esta ciudad se conservan restos arqueológicos de la época del Mesolítico, los conocidos instrumentos de piedra picos asturianos. Fue un asentamiento romano importante en el norte, debido a sus puertos, y su desarrollo se alcanzó durante la Edad Media, y se completó en la Edad Moderna. Aparte de su arquitectura, iglesias, universidades y palacios, encontramos espacios naturales tan sorprendentes como el Parque de los Pericones, aunque no podemos dejar de destacar otros enclaves naturales, como el Cerro de Santa Catalina, el Monte Deva o los Jardines del Tren de la Libertad.
Sin embargo, más allá de estas ciudades, no puedes dejar de visitar otras regiones como Cudillero, Lastres, Llanes, Luarca, Ribadesella, Taramundi, Cangas de Onís o Bulnes, pequeños pueblos con el encanto y aire antiguo en sus calles.