Dice la canción que Sevilla tiene un color especial, poetas de todos los tiempos dedicaron algunas de sus letras a esta maravillosa ciudad donde nací. Sevilla tiene mil y un rincones para disfrutar, pero hay algunos lugares imprescindibles que ver en el casco histórico de Sevilla que no debes perderte si visitas la ciudad. Una vez que vengas no querrás marcharte.
Un poquito de historia…
Sevilla es la capital de Andalucía, antiguo enclave fenicio, Sevilla se convirtió en la época romana en una de las ciudades más relevantes de la península ibérica, condición que mantuvo durante la Edad media, tanto en el periodo musulmán como en el cristiano.
Alcanzó sus cotas de mayor grandeza económica tras el descubrimiento de América, cuando monopolizó las relaciones entre Europa y el nuevo continente.
Sevilla siguió expandiéndose a lo largo de los siglos, y fue en el siglo XX en una parte muy importante gracias a la celebración de dos ferias internacionales, la Exposición iberoamericana de Sevilla en 1929 y la Exposición Universal de 1992.
Qué ver en el casco histórico de Sevilla: tres monumentos patrimonio de la humanidad
Con una extensión de casi cuatro kilómetros cuadrados es el centro histórico más grande de España y uno de los mayores de toda Europa. Coincide con el núcleo urbano que rodeaba la muralla de la ciudad en la edad media, esto evidencia su importancia ya en este tiempo.
En el casco histórico es donde se encuentran los principales monumentos de la ciudad como la Catedral, la Giralda, el Palacio arzobispal, los Reales Alcázares, o el Archivo de indias.
Pasear por el casco histórico de Sevilla es perderte entre callejones estrechos, algunos casi por donde es imposible pasar más de dos personas a la vez, herencia de su pasado musulmán. Es encontrarte a cada paso templos e iglesias en su gran mayoría pertenecientes al barroco, recogidas plazas y casas señoriales resultado de la riqueza durante los siglos XVI Y XVIII gracias al comercio con América y el resto del mundo en su animado puerto junto a la Torre del Oro.
En 1987 se declararon Patrimonio de la Humanidad tres importantes edificios del Centro Histórico de la ciudad de Sevilla, la Catedral, los Reales Alcázares y el Archivo de Indias.
El conjunto de estos tres edificios forma un conjunto monumental de primera categoría, situados dentro del corazón de la ciudad de Sevilla.
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La Catedral de Sevilla
La Catedral de Sevilla se levantó sobre una gran mezquita almohade. Su campanario, la Giralda y el patio de los naranjos formaban parte de ella. En 1401 comenzaron las obras de la Catedral más grande de Europa.
Sevilla tiene fama de ser una ciudad muy plana, y es cierto, pero la Catedral se encuentra construida en una pequeña elevación que hace que se divise desde muchos puntos desde las afueras de la ciudad. Es uno de los lugares imprescindibles que ver en el casco histórico de Sevilla.
Construida en estilo gótico dedícale en tu visita tiempo para disfrutar de las obras de arte de sus capillas, de su impresionante retablo mayor protegido por una hermosa reja de hierro forjado del siglo XVI. En la sacristía mayor se encuentran entre otras obras, varios cuadros de Murillo.
Y por su puesto no te vayas sin ver la Tumba de Cristóbal Colón donde alegorías de los reinos de Castilla, León, Aragón y Navarra sostienen el ataúd. Después de muchos dimes y diretes en 2006 se hicieron estudios de ADN en la Universidad de Granada, donde se contrastaron los restos de Colón con los de su hermano mayor Diego y se determinó que los restos que se encuentran en Sevilla son auténticos.
Una vez que visites la Catedral, disfrútala desde fuera, su arbotantes, las esculturas de sus puertas, mi preferida la Puerta del Perdón, en parte perteneció a la antigua mezquita, y aún quedan vestigios como inscripciones que repiten versículos del Corán como “el poder pertenece a Alá” y “la eternidad es de Alá”.
En frente de esta puerta se encuentra la calle Alemanes, donde aún existen algunos negocios tradicionales relacionados con la numismática y al final de ella la preciosa Plaza de San Francisco, a las espaldas del Ayuntamiento.
La Giralda
La Giralda es sin duda el símbolo de Sevilla, esta torre campanario adosada a la catedral era originariamente el alminar de la antigua mezquita, al que se añadió en el siglo XVI el remate del campanario.
¡Menos mal que no se les ocurrió comenzar el campanario desde cero, porque la belleza de la torre hubiera sido una pena que se hubiera perdido!
Yo cada vez que la miro, me recuerdan sus yeserías, ventanitas y adornos un precioso encaje de bolillos que se recorta en el cielo casi siempre azul de Sevilla.
Y arriba del todo “El Giraldillo” una querida figura en bronce que hace las funciones de veleta y que representa el triunfo de la fe cristiana. La original se encuentra en una de las puertas de la catedral, la que da hacia la Plaza de la Inmaculada, se cambió por una copia porque el peso estaba afectando a la torre.
Los Reales alcázares
Este antiguo palacio de los gobernadores musulmanes del sigo IX a lo largo de los siglos fue creciendo y evolucionando con otras estancias cristianas como el Palacio de Pedro I. Hoy en día el Alcázar de Sevilla es un conjunto mudéjar de patios y salones ricamente decorados.
Mi consejo es que vayas a visitarlo a primera hora de la mañana, y disfrutes del olor de los naranjos en sus jardines y el rumor de las fuentes. Recorre sin prisas sus patios, y admira los azulejos y yeserías realizadas por artesanos de Granada y Toledo.
Patios tan bonitos como el de las Doncellas, el de las muñecas, el de la Montería… y lugares con tanta importancia histórica, como la Casa de la contratación donde la propia Isabel I envió sus navegantes al Nuevo Mundo.
Estos tres monumentos tienen muchísima historia, anécdotas y detalles que siempre es mejor conocer con una visita guiada, puedes hacer una reserva de un tour por la Catedral, la Giralda y el Alcázar desde este ENLACE.
El Archivo de Indias
El Archivo de indias demuestra el protagonismo de Sevilla en la colonización y explotación del nuevo mundo. Construida por Juan de Herrera, funcionó en un principio como lonja, más tarde Carlos III mandó reunir en un solo lugar toda la documentación referente a las Indias.
Es una visita muy interesante aquí se guardan cartas manuscritas de Cristóbal Colón, Hernán Cortés, Cervantes y hasta George Washington.
En esta zona, la Plaza de la Inmaculada, la Plaza de la Virgen de los Reyes, los Jardines de Murillo y el Barrio de Santacruz, serían suficiente para justificar una visita a Sevilla.
La visita turística al Archivo General de Indias es libre y gratuita.
Horario: Lunes – sábado: 9:30 – 17:00 h. Domingos: 10:00 – 14:00h.
El Barrio de Santa cruz
Si hay un lugar imprescindible para visitar en Sevilla este es, sin duda, el Barrio de Santa cruz.
El Barrio de Santa Cruz es la antigua judería de Sevilla, es una verdadera maraña de callejones con bonitas casas de ventanas enrejadas y flores, con recoletas plazas y patios, que lo hacen uno de los barrios más bonitos y pintorescos de Sevilla.
El casco histórico de Sevilla no acaba aquí, Plazas como la Plaza Nueva, calles como la calle Sierpes, Tetuán forman parte de su centro comercial más tradicional.
La Iglesia del Salvador, la Plaza de la Alfalfa, el barrio del Arenal; donde se encuentra la Plaza de Toros, la calle Feria y la Macarena… todos estos lugares salpicados de cientos de Iglesias y rincones con encanto que apetece pasear sin prisas y haciendo algunas paraditas en los múltiples bares donde degustar una “tapita” por ejemplo de pescaito frito.
Seguiremos paseando por Sevilla…
Muchas gracias Mar, unas fotos espectaculares. Sin duda Sevilla es una ciudad preciosa para pasear y recorrer.
¡Muchas gracias!
Sevilla es una preciosidad y además es mi ciudad 🙂
Y muy fácil de pasear por ella, tiene un tamaño perfecto para hacer turismo. Pero en verano…por la sombrita, ja, ja, ja, ja