Alzándose sobre el corazón de la ciudad, el ornamentado Duomo y su cúpula naranja se han convertido en simbolo de la ciudad. La Catedral de Florencia, Santa María del Fiore, es una de las visitas imprescindibles que hacer en Florencia.
La catedral florentina es uno de los edificios más grandes de la cristiandad. El Baptisterio, con sus famosas puertas de bronce, pueden datar del siglo IV y es uno de los edificios más antiguos de Florencia. El campanario diseñado por Giotto, la cúpula de Brunelleschi y el Museo de la ópera del Duomo, completan un conjunto que no puedes perderte.
La Catedral de Florencia: obra maestra del Renacimiento italiano
El Duomo de Florencia es una de las obras maestras del arte gótico y del primer Renacimiento italiano. Está revestido de mármol de tres ciudades toscanas: el marmol blanco de la ciudad de Carrara, el verde traido de Prato y el rojo de la preciosa ciudad de Siena.
Construida en parte gracias a los Medici –los señores de Florencia–, es mundialmente famosa por su cúpula, obra maestra de la arquitectura renacentista. Su nombre completo, Santa María de la Flor hace alusión a la flor símbolo de la ciudad: el lirio.
Casi desde cualquier punto de Florencia, es posible ver su impresionante cúpula, de hecho es la segunda catedral más grande de Italia, cuando se consagró daba cabida a toda la población de Florencia: unos 30.000 habitantes. Una obra de casi 150 años en la que trabajaron algunos de los arquitectos y artistas más importantes de su época. Su fachada neogótica, fue una copia del estilo del campanario que se añadió entre 1871 y 1887.
Es imposible no caer embobado mirando todos los detalles de su fachada, sus puertas y esculturas.
El conjunto, formado por la iglesia, el campanario y el baptisterio, constituye una de las joyas artísticas y arquitectónicas de Florencia.
La Catedral de Florencia por dentro: ¿Cómo es el interior del Duomo de Florencia?
Si es impresionante en su exterior, el interior no se queda atrás.
Una vez que entras lo primero que llama la atención es su colorido suelo de marmol realizado en el siglo XVI con intrincados dibujos geométricos diseñados por Baccio d’ Agnolo y Francesco da Sangallo.
Una vez deslumbrado no dejes de admirar sus detalles, dedícale tiempo, merece la pena.
La Catedral de Florencia, se construyó con tres anchas naves rematadas en una grandiosa cúpula octogonal. Estas anchas naves se completan con tres ábsides coronados con pequeñas copias de la gran cúpula, que albergan cinco capillas cada una, con magníficas vidrieras del siglo XV.
Otras de las obras interesantes en el interior de la Catedral de Florencia es la obra del pintor Michelino: “ Dante iluminando a Florencia con su divina comedia”(1465), donde muestra al poeta fuera de Florencia en el purgatorio, el infierno y el paraiso al fondo.
Muy cerquita del santuario de marmol en el altar mayor y las capillas del este se encuentra la entrada para subir a la cúpula, 463 escalones te esperan para disfrutar de las vistas más impresionantes sobre Florencia.
La cúpula de la Catedral de Florencia: La obra maestra de Brunelleschi
Santa Maria del Fiore ya tenía una cúpula de madera que conllevaba muchos problemas técnicos, la cúpula de Brunelleschi fue el afortunado resultado de un concurso y bastantes discusiones con su colega Lorenzo Ghiberti.
Brunelleschi, ganador del concurso, se inspiró en la cúpula de “doble pared” o “doble casco” del Panteón de Roma. Las soluciones del artista eran ingeniosas y sin precedentes, como el peculiar diseño octogonal de doble casco. La cúpula se eleva sobre un tambor octogonal, lo que permitió que la cúpula entera fuera construida desde la superficie, sin necesidad de andamios, que suponían un elevado costo. La cúpula externa está sostenida por otra interna que actua como apoyo.
Además de la belleza de esta cúpula que pesa 37.000 toneladas métricas y contiene más de 4 millones de ladrillos, su autor tuvo que inventar máquinas elevadoras especiales y grúas para izar las piedras grandes. Estas máquinas especialmente diseñadas y las brillantes técnicas de albañilería fueron también espectaculares contribuciones a la arquitectura de Brunelleschi.
En su interior los frescos del juicio final son realmente espectaculares fueron realizados por Vasari y completados por Zuccari.
Si eres capaz de subir los 463 escalones hasta su cúspide podrás disfrutar de vistas espectaculares de la ciudad.
La basílica se encuentra dentro de la declaración del Centro histórico de Florencia como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
Junto a la Catedral de Florencia,es imposible perderse dos maravillas del arte medieval: el Baptisterio y el campanario.
El Campanile de la Catedral de Florencia
El campanario de la catedral de Florencia es un ejemplo típico de los campaniles italianos, edificios separados de la iglesia para evitar los daños por vibraciones en el edificio de la iglesia.
Está ubicado extrañamente a un lado de la iglesia y seis metros más bajo, seguramente para dejar espacio y protagonismo a la gran cúpula que se iba a construir
Es una torre en cinco niveles profusamente decorada y recubierta con distintos colores de mármoles como la Catedral y el Baptisterio. Los distintos niveles decorados con distintos tipos de ventanas góticas la hacen muy elegante. En el primer piso hay unos relieves de Andrea Pisano que reproducen la Creación, las Artes y la Industria.
Si no has subido a la cúpula, puedes subir al campanario, En lo alto hay una terraza panorámica con vistas preciosas sobre la cúpula y el centro de Florencia. Son 400 escalones, 63 menos que la cúpula. ( Un pequeño alivio 😉 )
El Baptisterio de la Catedral de Florencia
Aunque se pensaba que tenia un origen romano, y en su lugar habia construcciones antiguas, el Baptisterio octogonal tal y como se conoce hoy en día, fue construido en estilo románico, alrededor del año 1059.
El Baptisterio tiene ocho lados iguales con uno rectangular agregado en el lado oeste. Esta forma octogonal simboliza los “ocho días” considerado un símbolo para la vida eterna dado a través del bautismo.
El techo sobre la pila octogonal donde fueron bautizados muchos florentinos, incluido Dante, está decorado con mosaicos del siglo XIII sobre el juicio final.
El Baptisterio de San Juan es particularmente famoso por sus tres conjuntos de puertas de bronce, de un gran valor artístico.
La puerta del sur es de Andrea pisano y las de norte y este son de Lorenzo Ghiberti.
La puerta este de bronce de Ghiberti se encargó en 1401 para celebrar el fin de la peste, tanta riqueza tenía en sus relieves que el gran Miguel Ángel la llamó :”La puerta del paraíso” la que verás en el Baptisterio es una réplica, los diez paneles con temas de las escrituras están expuestos en el Museo de la Opera del Duomo.
Museo de la Opera del Duomo
En este museo podrás descubrir aún más detalles sobre la Catedral de Florencia y la ciudad.
Se dedica principalmente a las esculturas de la catedral de Florencia: objetos del exterior del Duomo, el campanario y el baptisterio. También se encuentran en este hermoso museo algunas piezas originales del conjunto de la Catedral y el Baptisterio, como por ejemplo los paneles originales de la puerta este.
Hay salas dedicadas a Brunelleschi, exhibiéndose herramientas utilizadas en la época de la construcción de la catedral, dos maquetas, una de la catedral y otra de la fachada.
Distintas salas te van a mostrar estatuas de artistas florentinos, pinturas religiosas y reliquias. Su principal obra escultórica es la Piedad florentina de Miguel Ángel.
Cómo visitar la Catedral de Florencia
Entrar en la catedral es gratis, solo tendrás que pagar para acceder a la cripta. Pero si quieres visitar todo el conjunto: Catedral, Baptisterio y Campanario hay un billete único que cuesta unos 18 euros.
Ya te he contado algunos detalles que recuerdo de mi visita a esta joya del Renacimiento italiano, pero mi consejo es que para conocer mejor esta maravilla, contrates una visita guiada a la Catedral de Florencia donde conocerás más datos de la historia, las curiosidades y podrán responder a todas tus dudas.