¡Las vueltas que da la vida! ¿Quién me iba a decir a mí que a estas alturas iba a estudiar inglés en Malta?
Estudiar inglés siempre ha sido mi asignatura pendiente, estudié francés en mi vida de estudiante y estudiar inglés era algo que siempre iba postergando y que deseaba mucho, pero por una razón o por otra nunca llegaba a decidirme. Pero me llegó la oportunidad de probar el sistema de Sprachcaffé y no lo dudé. Os cuento mi experiencia.
Sprachcaffé es una empresa que tiene escuelas de idiomas certificadas por organizaciones internacionales donde puedes aprender inglés, español, francés, italiano, alemán, chino y árabe en distintos destinos alrededor del mundo.
En mi caso elegí estudiar inglés en Malta, me pareció que era una buena oportunidad para comenzar y además su sistema y horarios me permitían conocer las islas maltesas, algo que me apetecía muchísimo.
Malta fue colonia británica, sus idiomas oficiales son el maltés, y el inglés. El maltés es un idioma que proviene del árabe y con influencias sicilianas, italianas, griegas, españolas…Y el segundo idioma oficial es el inglés por lo que es un lugar ideal para practicar lo aprendido en las clases de manera natural cuando visites la isla.
En mi opinión es esta inmersión total en un lugar donde se habla el idioma donde reside la diferencia y el éxito para aprender realmente un idioma. También debes poner de tu parte y hacer el esfuerzo de practicar lo aprendido.
En mi caso, al viajar sola, no me quedaba más remedio que hablar en inglés. Y no me fue tan mal, conseguí tomar los medios de transportes adecuados, llegar a los lugares que me había propuesto y disfrutar de mis visitas por la isla.
Malta es una isla preciosa que además de playas de aguas cristalinas, te ofrece lugares y ciudades con mucha historia, como su capital La Valeta, Medina, Rabat… o puertos tan preciosos y auténticos como Marsaxlokk, o Marsaskala o incluso puedes ir a conocer las islas más pequeñas de Gozo y Comino, paraíso del submarinismo y de playas paradisíacas de arena blanca y mar azul.
Cómo estudiar inglés en Malta con Sprachcaffe
Una vez que tomes la decisión puedes elegir distintas opciones tanto para tus cursos como para tu alojamiento.
En mi caso al ser la primera vez que me enfrentaba al idioma opté por las clases solo por la mañana (De 9 a 12:30 h) y una vez allí me pareció un horario suficiente, ya que si optas por intensivo mañana y tarde la primera vez, pienso que sería demasiada saturación.
¡Mi cabeza no daba para más!
Pero puedes optar por cursos más o menos intensivos o más o menos largos, dependiendo de cual sea tu objetivo; aprender, perfeccionar, obtener títulos oficiales, etc…
Antes de llegar o en tu primer día, tienes que hacer un test para ver cual es tu nivel y se te asignará un grupo y profesor en consonancia. Yo partía de 0 por lo que en mi grupo mis compañeros tenían más o menos el mismo nivel. Compartí clases con dos alumnas japonesas, una chica coreana, otro chico colombiano y tres compañeras polacas.
Esta riqueza cultural también es un valor positivo en este sistema de estudios. Nuestra “Teacher” repetía constantemente y con distintos sinónimos los conceptos por lo que nos resultó fácil seguirle. Siempre nos hablaba en inglés, pero nos lo puso muy fácil. Las clases son muy entretenidas, con ejercicios y mucha participación de los alumnos. El viernes también se vuelve a hacer un test para ver si pasas o no de nivel.
En mi caso me alojé en un apartamento que compartía con otras dos chicas, una polaca y otra japonesa por lo que también teníamos que usar el inglés para comunicarnos. Pero no supuso ningún problema.
También tienes la opción de elegir otros tipos de alojamientos: alojarte en familias que colaboran si te sientes así más protegido o en estudios; apartamentos más pequeños, que te permiten más independencia.
En la residencia de Malta también tienes un bar/ restaurante, en mi caso tenia incluido media pensión, por lo que desayunaba antes de las clases y podía elegir almorzar o cenar según me interesara ese día.
En mi caso como tenía muchas ganas de conocer la isla, cada día me preparaba un sándwich y salía a hacer turismo. Por la noche, ya cansada, cenaba relajadamente en la escuela. Tienes varios menús para elegir para todos los gustos, desde hamburguesas, pizzas o sopas y platos combinados.
Además de conocer Malta, la escuela te ofrece una serie de actividades por las tardes para que te sientas más integrado, fiesta de bienvenida, actividades deportivas, karaoke, y algunas excursiones. Esta escuela también tiene una preciosa piscina que debe ser una delicia para relajarte después de las clases en verano.
Otra de las cosas que me gustó mucho en la escuela fue el ambiente multicultural y de todas las edades, no pienses que solo es cosa de jóvenes, hay estudiantes de todas las edades, incluso algunos padres optan por inscribirse junto a sus hijos, una experiencia que debe ser muy divertida (Más para los padres, no sé si tanto para los hijos, ja, ja, ja)
La escuela se encuentra en la zona de Pembroke, hasta aquí llegas con el autobús línea X1 desde el aeropuerto en unos 45 minutos. Cuando llevas dos días lo sientes como tu barrio en el que puedes hacer la compra en el supermercado o coger el autobús local para conocer la isla. La verdad que viajaba sola y Malta ha sido un lugar donde me he sentido muy segura.
Mi experiencia ha sido muy buena, partía de 0 en inglés y en una semana alcancé a tener mi diploma de elemental. Mi único error no haberme quedado más tiempo…confío en volver.
Reservar un curso para estudiar inglés en Malta
Si te animas a estudiar inglés en Malta con Sprachcaffe, solo por ser seguidor de Mi ruta, puedes obtener un descuento de 25 € por semana, un máximo de 16 semanas (400 €) introduciendo el código: MIRUTA en tu reserva en este ENLACE.
*Descuentos aplicados en cursos para adultos + alojamiento a cualquier destino (salvo Boston y Dublín) válido hasta el 31/12/2020
Mis agradecimientos a Sprachcaffe por darme a conocer sus actividades, mis opiniones son independientes y están basadas en mi percepción real del producto.
Personalmente viajar me ha cambiado totalmente la vida. Empecé a viajar cuando era adolescente, en mi época de universitario, donde realicé un erasmus en Portugal, cuando llegó la hora de volver a casa tenía tanta sed de aventura y de conocer cosas nuevas que era imparable. A los tres o cuatro días decidí irme a trabajar todo el verano a Grecia, que fue donde tenía una oferta de trabajo y no lo pensé dos veces. Tanto aprender el idioma como poder pasar por tantas nuevas y variopintas experiencias cambia totalmente tu personalidad. Después de esto he seguido viajando regularmente y actualmente resido en España aunque espero jubilarme e irme fuera.
Yo opino que aunque vayas a estudiar un idioma a otro país siempre es mejor contar con un pequeño background y no dejarlo todo a la aventura. Personalmente os recomiendo que os hagáis algún curso de alemán para aprender lo básico. Ya que no estaba muy metido en el inglés (manejo más el francés). Personalmente os recomendaría este que hice hará un año y pico, es online y puedes gestionarlo tú cuando quieras mucha suerte amigos!
Muchas gracias por tus aportaciones, saber idiomas lógicamente es un plus para viajar, y a veces incluso es el motivo del viaje. Gracias por leer Mi ruta
pero… por qué no me publicáis el enlace?
Porque agradezco tus comentarios, pero si quieres hacer publicidad en mi blog eso lleva otros procesos 🙂
Al final, creo que merece la pena buscar un lugar que te ofrezca buen aprendizaje de inglés y buena experiencia turística al mismo tiempo. Y Malta es ideal para eso. Yo pasé un verano ahí hace diez años y fue maravilloso.
La opción combinada de clases y turismo me parece perfecta, porque puedes practicar lo aprendido en las clases teóricas. Muchas gracias por tu opinión, y por leer Mi RUTA. Un saludo. MAR