El sexo y el amor en los viajes es un artículo que no pretende más que compartir algunas curiosidades, anécdotas y situaciones simpáticas con las que podemos encontrarnos cuando estamos de viaje.

O describir lugares en cualquier parte del planeta donde el sexo y el amor se viva de manera distinta…

¿O no?

Cuando propuse hacer un artículo sobre el sexo y el amor en los viajes a varios compañeros blogueros algunos pensaban que bromeaba, pero seguro que todos podrían contar una y mil anécdotas de este tipo viajando.

El sexo y el amor son una constante intrínseca al ser humano y que se expresa de mil formas distintas en cualquier parte del planeta.

Antes que nada agradecer a los blogueros y blogueras su generosidad al compartir sus experiencias.

Una anécdota de sexo y amor en los viajes. Maruxaina y su mochila

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Durante uno de nuestros viajes a mi querido Marruecos elegimos el tren nocturno que salía de Tánger pensando en descansar y llegar estupendos a Marrakech a primera hora de la mañana. Súper contentos porque nos tocó un compartimento para los dos solos, nos acomodamos en seguida y disfrutamos del paisaje antes de que oscureciese.

Antes de dormir, tuvimos un momento súper abrazo. Yo soy muy de abrazar pero en la calle no están muy bien vistas las muestras de cariño así que aproveché la intimidad hasta que la puerta se abrió de repente. La cara del revisor era todo un poema, nos pidió los billetes de malas maneras y se marchó murmurando a saber qué. Menos mal que sólo era un abrazo y que teníamos la luz encendida pensé yo.

Sin darle mayor importancia pronto nos invadió el sueño pero duró poco. Esa noche, aquél hombre vino cada media hora a nuestro compartimento. Abría la puerta, encendía la luz y tras comprobar que no había ninguna bacanal allí dentro se iba sin decir nada. Fue inútil preguntarle por qué venía tantas veces, incluso le puse mala cara pero nada, el hombre ni se inmutaba.

Así que si alguno tiene en mente una noche loca de sexo en un tren marroquí que se lo piense dos veces. Nosotros por un abrazo pasamos ¡¡una noche interminable!!

La pensión del amor en Lisboa, Kris por el mundo

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En Lisboa, a poca distancia del río Tajo, se puede visitar lo que fue la antigua zona de prostitución de la capital portuguesa.

Se trata de Cais do Sodre, un peculiar barrio renovado donde los turistas ocupan el lugar de las antiguas meretrices y de aquellos marineros que acudían en su busca. Hay animados restaurantes a pie de calle, pero para sentir como era de verdad la zona hace unas décadas basta con subir las escaleras que llevan hasta la Pensao Amor. Hoy se ha convertido en un singular café y bar de copas en el que sin embargo desde la decoración de los baños hasta la recreación de alguna antigua habitación recuerdan que aquí hubo un prostíbulo.

Si alguien viaje a Lisboa y decide visitar este lugar, mi recomendación es que suba por las escaleras del portal sobre el que los balcones abiertos dejan salir a la calle la música de alguna de las actuaciones (no eróticas) que suelen tener lugar allí,

El sexo y el amor en los viajes tiene aquí un cita importante de descubrimiento.

Amor con urgencia. Mi ruta

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Cuando estas visitando una ciudad a veces hace bastante calor, casi siempre nos acompaña una botellita de agua y cuando llevas más de una o dos o tres, se hace necesario ir al baño.

A veces buscas un establecimiento y otras, en algunas ciudades, existen unos servicios públicos que consisten en unas cabinas donde, después de echar una moneda, puedes solventar la necesidad de “des-beber”.

En esas estábamos, concretamente en Estocolmo, esperando la cabina-baño que se encontraba ocupada.

De pronto comenzamos a escuchar bastantes ruidos que surgían del interior. Mientras más impacientes nos volvíamos, más ruidos y golpes provenían del interior de la cabina. “¡OH ya sabemos porque sigue ocupada, alguien debe haberse quedado encerrado en el interior!”

Comenzamos a aporrear la puerta con la intención de ayudar a esa pobre persona “presa” en la cabina. En nuestro torpe inglés le preguntábamos si necesitaba ayuda, nos respondía con gritos en sueco que no entendíamos, por lo que seguíamos aporreando la puerta e intentando abrirla.

Preocupados por aquella persona que podría estar sufriendo pensamos en llamar a la policía, aquello era una emergencia. Claramente aquellos gritos sofocados que surgían del interior debían de ser de alguien que sufría de claustrofobia.

Y en esas estábamos, intentándonos hacernos entender por teléfono con la policía en inglés, cuando de pronto la cabina se abrió…

De ella salió primero un caballero muy malhumorado y detrás de él…una chica con cara de pocos amigos…

…“¿Has visto que bonita la torre?”…Disimulamos como pudimos y creo que no notaron que éramos los que aporreábamos la puerta.

El sexo y el amor en los viajes puede encontrar su hueco en  lugares insospechados

El barrio rojo en Amsterdam.Viajes y rutas

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Seguro que has oído hablar del Barrio Rojo de Ámsterdam, uno de los lugares más turísticos de la ciudad, pero si no lo has hecho, yo te lo cuento.

En esta zona de la ciudad, se fueron instalando burdeles debido a la demanda de los marineros que pasaban largos periodos de tiempo en altamar. Algunas mujeres se exponían en los bajos de sus propias casas para “venderse”, diferenciándose del resto con unos faroles rojos que ponían en sus fachadas. Esto fue evolucionando con los años y las prostitutas de hoy en día se colocan tras escaparates con luces rojas en su interior, ofreciéndose a los clientes. Ellas son las que alquilan el escaparate en el que trabajan y pagan sus impuestos como cualquier otro trabajador holandés, ya que desde 1960, la prostitución es legal en los Países Bajos.

No se debe hacer fotos de los escaparates, pero… ¿quién puede resistirse?

El sexo y el amor en los viajes por la Garrotxa. El viaje me hizo a mí

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Durante los 4 años que vivimos en Barcelona teníamos muchas ganas de ir a Olot para conocer toda la zona de la Garrotxa y sus volcanes, así que un fin de semana reservamos una habitación baratita en un hostal y nos fuimos a pasar dos días.

Cuando llegamos nos encontramos con que era la feria de la tapa y el vino, así que decidimos probar. Ya sabéis que esto de la gastronomía nos encanta. Pues fuimos de bar en bar probamos sus vinitos y sus tapas y nos gustó tanto que llegamos al hotel a las 4 a.m.

A las 12 teníamos que dejar la habitación pero nos levantamos con la resaca media hora antes y nos pusimos romanticones, tanto que en plena faena el dueño del hotel nos abrió la puerta pensando que ya nos habíamos ido, entrando en la habitación como Pedro por su casa… No se quien pasó más vergüenza si él o nosotros. Ya no os voy a contar cómo terminó la cosa… pero al hacer el check out el señor seguía disculpándose y pidiéndonos perdón…

Templos de Khajuraho en la India. ¿pornografía religiosa? Mil viatges

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Los templos de Khajuraho en la India son conocidos también como los templos del Kamasutra. Y no es de extrañar. Fue la dinastía de los Chandella quien mandó construir entre los siglos X y X este maravillosos conjunto de templos hinduistas que son especialmente conocidos por la gran cantidad de escenas eróticas en forma de altorelieve que contienen. Uno diría, incluso, que se podría hablar de pornografía pura y dura, algo que desde nuestra visión occidental de la religión nos es difícil de entender (¿se imaginan escenas de menage a trois en una catedral cristiana o en una sinagoga judía?).

Las representaciones son de todo tipo, formando un compendio de posturas sexuales que el viajero hará bien de no intentar imitar a su llegada al hotel, a no ser que quiera acabar con una segura luxación de cadera. Se trata, a menudo, de posiciones inverosímiles dignas de los mejores contorsionistas que, sin embargo, pueden hacer volar la imaginación hasta límites insospechados.

Los Templos de Khajuraho son uno de los conjuntos arqueológicos más maravillosos de la India y sin duda, los de mayor carga sexual que jamás hayamos conocido.

El terror de las camas de hotel.Los viajes de Margaviller

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Nuestra historia sobre sexo y amor en los viajes no es picarona ni cuenta ningún detalle así vergonzoso. Quizás en ella, como en la mayoría de las cosas de esta vida, la imaginación sea más fructífera que la propia realidad.

Nos situamos en nuestro primer viaje como pareja, Córdoba la ciudad elegida. La primera noche de hotel tenemos un pequeño percance con la cama. En mitad de la noche noto como caigo de buenas a primeras, la pata delantera izquierda se rompe. Como no son horas de molestar a nadie, consigo sujetar el somier con la maleta de viaje.

A la mañana siguiente, haciendo la salida del hotel, comentamos el hecho a la chica de recepción. Su cara fue un poema, nos sentimos avergonzados, como si hubiésemos hecho algo malo, no siendo responsables de tal circunstancia.

Pero sí, la imaginación de la chica fue mucho más lujuriosa que la realidad, y ahí seguimos, con fama de romper camas por los hoteles 😀 (maté a un gato y me llaman matagatos)

Sexo, Drogas y Rock&Roll.Misterbackstage

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Cierto es que la música une: Perdura la leyenda-maldición-mito de “Sexo, Drogas y Rock&Roll”  en actuaciones de giras de bandas y grandes festivales de Rock

Hay cantidad de gente que aprovecha para pasar una estancia divertida al margen de la música y pasarlo “en grande” cuando va de conciertos a un país o destino turístico. El mito se hace realidad y en muchas ocasiones, la música, la indumentaria salvaje y el estar en tu medio con tu “tribu” facilita las cosas…

Viajar de “conciertos” sube al máximo los niveles de testosterona y refuerza tu sex-appeal. Rock the present !!

¿Los piropos ofensa o galantería? Los viajes de Claudia y Lucía

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Cuando sales al extranjero te das cuenta de que verdaderamente la gente se relaciona de manera diferente dependiendo del país…

La manera en la que la gente piropea (generalmente  los hombres porque a esto no ha llegado aún la paridad) hace parte de la demostración de la sexualidad,  varía con la nacionalidad, y a veces las aludidas no nos enteramos de por dónde nos da el aire.

Para ejemplificar :

Claudia Campos

“En plena carrera en taxi por las grandes Avenues de Nueva York, y con mi familia al completo dentro del taxi, el conductor comenzó a ser muy amable, y aprovechando la condición de intimidad que le otorgaba que fuéramos los dos únicos angloparlantes en el coche se me declaró y me propuso que me quedara en la Gran Manzana con él. Mientras tanto,  mi familia, ajena a la pedida de mano de su primogénita, alababa mi dominio del inglés.

Yo me pregunto, ¿Le habrá funcionado en alguna ocasión a este taxista la técnica de acoso y derribo?”

Lucia SB

“En Colombia, un día al salir de una tiendita de barrio, me gritaron con una sonrisa:

-¡Eres una china muy churra!

Yo, que estoy en desacuerdo con todas las formas de piropo callejero, respondí a lo que me pareció una gravísima ofensa (y como hubiera hecho cualquier valiente como yo):

– ¡China churra tu tía!

Cuando llegué muy ofendida por ese gravísimo insulto a mi casa, donde estaban mis amigos colombianos, me explicaron entre risas que no sólo no me habían insultado sino que me habían llamado jovencita y guapa de una manera coloquial.”

Claudia y Lucia son las blogueras de Los viajes de Claudia y Lucía

Espero que este artículo sobre el sexo y el amor en los viajes te haya resultado interesante, seguro que al leer este artículo vinieron miles de anécdotas a tu memoria, ¿te atreves a contarlas en los comentarios?

Cápsula Responsable

Un turista responsable apoya los derechos humanos y no contribuye a los impactos indeseables del turismo sexual y  la explotación infantil.

 

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